Lucas Canziani, referente del grupo “Basta de Robos en Viedma”, dialogó con FM DE LA COSTA tras el fallecimiento de Jonathan Caracciolo, joven de 29 años que fue alcanzado anoche por una bala perdida y que murió horas después.
Ante el medio radial, Canziani expresó que “desde hace ya tres meses que venimos diciendo esto. Lamentablemente, le tocó a una persona totalmente inocente, que nada tiene que ver con la delincuencia. Sabíamos que era previsible que esto en algún momento llegara”.
Declaró que “la muerte de Jonathan Caracciolo no tiene que quedar en vano. Tiene que ver con un estado completamente ausente, con reclamos que venimos haciendo desde hace bastante tiempo”.
Además, expresó que “su muerte tiene nombre y apellido: el jefe de Policía, Osvaldo Tellería; la ministra de Seguridad, Betiana Minor; y el gobierno de la provincia de Río Negro. Tantas veces, y por todos los medios posibles, tratamos de llegar a ellos para encontrar solución a esto, y ni siquiera nos recibieron”.
En ese sentido, recordó que “nosotros íbamos a ir a una reunión en la que iba a ir Minor, en Fernández Oro, para poder hablar con ella, y desactivó el encuentro porque íbamos a estar nosotros presentes con vecinos autoconvocados del Alto Valle”.
Agregó que “se siguen manejando con el famoso mapa del delito desde hace cincuenta años, que es un sistema totalmente obsoleto para los tiempos actuales, y la delincuencia cuenta con medios mucho más tecnológicos y modernos que la propia policía; van siempre un paso por delante, y hay que cambiar todo eso. Para eso, el gobierno tiene que tener la decisión política de hacerlo”.
Consultado sobre si tienen esperanzas de encontrar soluciones con el nuevo gobierno provincial que asumirá en diciembre, Canziani expresó que “Weretilneck es el mismo partido político de quien gobierna hoy, y de hecho él puso a Arabela Carreras, pero también tenemos antecedentes del gobierno anterior en donde todo esto no pasaba, y hemos analizado y escuchado muchas propuestas de campaña del gobernador electo en donde él mismo dijo que en Viedma y las ciudades más grandes había que volver a convocar a los Consejos de Seguridad, pero qué pasa: a la policía no le gusta que la controlen”.
“Todos los trabajos en cuestiones de seguridad tienen que empezar de abajo para arriba, escuchando al vecino, que es el que la vive todos los días. ¿No sería más fácil convocar al Consejo de Seguridad que, además, lo pueden hacer hoy, pudiendo actualizarlo y modernizarlo a los tiempos actuales?”, finalizó.
