Federico Lutz, ministro de Gobierno, Trabajo, Modernización y Turismo, dialogó con FM DE LA COSTA y detalló parte por parte en qué consiste el proyecto de retiro voluntario para agentes estatales en el que está trabajando el Ejecutivo de Río Negro.
En ese marco, Lutz informó que a día de hoy, la provincia cuenta con una planta de casi 57 mil trabajadores, y que en ese marco, buscarán recuperar la proporcionalidad de empleo público en comparación al sector privado, la cual el ministro consideró que se fue perdiendo con el correr de los años.
«El gobierno lo ha planteado a los distintos referentes del ámbito sindical, lo está trabajando dentro de sus equipos técnicos de Función Pública y Hacienda, con el objetivo de poder reestructurar la relación de empleo con determinados agentes desde el punto de vista del nuevo Convenio Colectivo que se está propiciando, y extinguir la relación laboral para aquellos que no se crean más comprendidos dentro de las políticas del Estado, o su pertenencia, que haya cesado en su motivación», señaló Lutz.
«Es la apertura de un nuevo camino en un proceso de transformación del empleo en los nuevos tiempos, pero es simplemente la generación de una oportunidad para los agentes administrativos. Hay un objetivo de reestructuración y estará sujeto a un cupo determinado, porque el Estado no puede prescindir de todos sus agentes. Por definición, es una organización prestadora de servicios, en donde la centralidad hoy lo tiene el recurso humano, con lo cual, tiene que estar limitado», continuó.
«En consonancia con eso, la adecuación de las nuevas tecnologías y el redimensionamiento de la relación de empleo en el marco del Convenio Colectivo de Trabajo que el gobierno está propiciando. Tenemos que visualizarlo como una oportunidad y no como un plan de achicamiento. Es la oportunidad para que los agentes puedan hacer nuevas tareas fuera del ámbito público, en primera instancia, y segundo, para acomodar la matriz laboral de la provincia en las proporciones históricas, en donde había un dominio del empleo privado por sobre el empleo público, que se perdió en el período 2023, y pretendemos salir a recuperarlo», detalló.
«No necesariamente está sobredimensionada, sino que se perdió la proporcionalidad histórica. El sector privado ha crecido más lentamente en la generación de mano de obra, y el sector público se ha acelerado a los tiempos. Eso requiere refuncionalizarlo, y una de las oportunidades que se están generando, son los planes de retiro voluntario», aportó.
«En principio, hoy hay arriba de la mesa del Ministerio de Hacienda un análisis de mejora a la propuesta original que equivalía a cinco o siete masas salariales, dependiendo la antigüedad de cada uno de los trabajadores entre cinco y diez años, excluyendo a los que estén en los últimos cinco años previos a la jubilación, y exenciones de carácter tributario para quienes reinicien actividades económicas o se conviertan en emprendedores, y el mantenimiento de la obra social IPROSS por un determinado momento», informó.
«La recepción es, como siempre en un universo tan grande de 57 mil agentes públicos en una provincia con la extensión territorial como la de Río Negro es diversa. Hay agentes que, por el sacrificio que significa el trabajo a la intemperie en los distintos rincones de la provincia y están dispuestos a hacerlos. Hay quienes están motivados con los planes de capacitación y prefieren conservar su espacio dentro de la Administración Pública; y hay otros que se han profesionalizado en tareas que fuera del Estado no las podrían realizar y les genera pasión, y por eso prefieren quedarse».
«Nosotros creemos que hay dos grandes etapas: una transitada aproximadamente entre 8 y 10 años, en donde se regularizaron determinados tipos de relaciones de carácter laboral que tenía el Estado, que estaban al borde de la precariedad, y se sancionaron las leyes de pase a planta durante la anterior gobernación de Alberto Weretilneck. Después, hubo un período posterior en la post pandemia, en donde por la imposibilidad de realizar una estrategia concreta en materia de recursos humanos, el Estado creció a una dimensión que tal vez no se justificó con el efecto final que tuvo la pandemia en la Administración Pública», concluyó Lutz.
