La doctora Edith Emilce Portugal, quien hace pocos días resultó sobreseída en el marco de la causa por la muerte de Martín Ferreyra -joven de 12 años que murió en marzo del 2021-, relató cómo vivió sus dos años habiendo estado imputada por la Justicia a la espera de una resolución final.
En diálogo con FM DE LA COSTA, contó que «a mí me culpan por homicidio culposo y por esto, tuve que ir al Juzgado de Garantías N°3 a pedir mi eximisión de prisión, que fue hace dos años y algo, fui con mi abogado. Lo firmé, y a todo esto, yo tenía que remitir informes si yo viajaba a algún lugar; declarar a dónde viajaba; con quién iba; si iba en auto particular; patente; domicilio en donde me iba a instalar; entre otras, y eso me perjudicó mucho, porque incluso no podía salir de mi domicilio».
Inclusive, mencionó en ese sentido que «para hacer guardias médicas, que son de 24 horas, tenía que pedir autorización».
Expresó que «la pasé muy mal, mucha gente creyó en mi inocencia, pero es un pueblo chico. Hay gente que me escupió en la calle, que me decía asesina, que entraba a la guardia y me puteaba, me decían muchos epítetos. Venían exclusivamente a decirme esas cosas».
Sostuvo luego que «soy la única médica de la causa que no renunció; todos los demás sí, pero yo no, porque yo sabía cómo había actuado y lo que había hecho. Tengo a mi marido que trabaja en Villalonga, a mi familia, a mi hijo, que viven acá, entonces no tenía por qué irme».
Relató que «pegaron panfletos afuera del hospital pidiendo mi renuncia. A la directora interina -en ese momento-, Mónica Gutiérrez, le entraron al patio de su casa a tirarle panfletos y creo que amenazas también. La pasé muy mal, me la pasaba llorando».
Sin embargo, tras conocer la resolución de sobreseimiento, aseguró que «estoy tranquila, pero también estoy triste por la muerte de Martín».
