Guillermo Tibaldi es ex comandante del submarino ARA San Juan, aquella nave que lamentablemente todos los argentinos recordamos por su trágico final en el que 44 héroes perdieron la vida por su hundimiento, en 2017.
Durante el 2019 y principios del 2020, Tibaldi rindió homenaje a los fallecidos en el naufragio, uniendo a Mar del Plata con el punto más alto del país: el Aconcagua, con el objetivo de llevar en una bandera argentina los nombres de las 44 personas hacia “lo más alto de la patria”.
Esta vez, el ex militar volverá a iniciar una nueva travesía, ‘zarpando’ desde el muelle marplatense, en el que solían amarrar el buque, hasta la localidad de Puerto Almanza, en Tierra del Fuego, lugar en el que fue visto por última vez el submarino.
En diálogo con FM DE LA COSTA, Tibaldi habló sobre el recorrido que llevará adelante: «Hice prácticamente toda mi carrera a bordo del submarino San Juan, y eso fue lo que me motivó hace unos años a realizar un homenaje. Realicé aquella travesía que duró 83 días, corriendo y caminando, desde el muelle del submarino, hasta lo más alto de la patria (el Aconcagua)», indicó.
Por eso es que pretende realizar otro homenaje: «Estuve en el último lugar en donde se lo pudo saludar al submarino, que zarpó un 8 de noviembre desde el puerto de Ushuaia, hasta meterse en un lugar en donde no se lo pudo ver. Por eso, la idea es poder hacer un memorial, y poder unir corriendo-caminando desde el muelle en Mar del Plata, saliendo el 6 de julio, hacia Puerto Almanza, en donde se lo pudo saludar. Son aproximadamente 3000 kilómetros», mencionó en el programa DESTINO SUR.
Contó que serían cerca de 100 días de travesía y otros 35 entre descansos y distintas charlas que brindará en instituciones educativas rurales. En ese marco, Tibaldi visitará a principios de agosto las localidades de Viedma y Carmen de Patagones, con quien tiene una conexión especial gracias a uno de sus ídolos, Luis Piedra Buena.
Sobre los tripulantes del submarino, recordó que «conocí a varios que eran ‘cabos modernos’, jovencitos. Eran ya suboficiales antiguos. El comandante fue subordinado mío por dos años en el Comando de la Fuerza de Submarinos. Tenía mucha gente conocida. Amén de haber perdido mi casa, perdí a muchos allegados»